Wakeboard, pesca y aventuras en El Carrizal

A 56 kilómetros hacia el sureste de la Ciudad de Mendoza, se ubica el dique El Carrizal. Es uno de los espejos de agua más antiguos que tiene la provincia y fue, durante muchas décadas, el más concurrido por mendocinos y turistas. Con los años, otras represas fueron construidas y quitándole un poco de protagonismo a El Carrizal. Sin embargo, los más fanáticos de actividades como wakeboard (o esquí acuático), pesca y aventuras en general, lo siguen considerando como el más apropiado.

Inaugurado a fines de la década de 1960, sobre le rio Tunuyán, esta importante obra de riego abastece a gran parte del oasis y se usa para regular el flujo del rio Tunuyán, cuya cuenca tiene arroyos nacientes en los glaciares de los Andes.

El dique El Carrizal es un sitio recreativo deportivo de gran atracción popular, en cuyas costas se desarrollan actividades de campings, con buenas instalaciones, centros recreativos, clubes y bases de deportes náuticos. Tiene embarcaderos y bajadas de lanchas, frecuentado por los amantes del pic nic, la vida al aire libre, cabalgatas y el disfrute del fin de semana o vacaciones en cabañas. Las actividades más populares son la pesca deportiva del pejerrey, motonáutica, esquí acuático, windsurf, velerismo y paseos en lanchas o canoas.

Allí se organizan concursos de pesca y el clásico Festival del Pejerrey, con espectáculos y puestos de comidas típicas. La RP 61, enlaza con el paredón y la margen este del embalse, compartido con el departamento de Rivadavia.

El Carrizal es el dique más equipado que existe en Mendoza. El perilago agrupa 31 clubes donde los visitantes pueden adquirir todo lo necesario para pasar una estancia amena, desde carne para el infaltable asado, hasta lombrices y mojarras. Así, está todo dado para incursionar o perfeccionar, según sea el caso de cada visitante, en el wakeboard, pesca o aventuras acuáticas.

Luján Playa

El departamento de Luján de Cuyo ha inventado el concepto de playa para Mendoza, rodeada de montañas y desierto. Así, hace algunos años inauguró una playita al costado de las aguas del río Mendoza, mientras que desde hace algún tiempo también está habilitado un predio que pregona el mismo concepto en las costas de dique El Carrizal.

“Luján Playa el Carrizal” comprende un emprendimiento de 3,5 hectáreas con estacionamiento para vehículos, 3 grandes piletas, un sector de muelle para embarcaciones náuticas y un área de pesca.

Crisis hídrica

Desde hace años, Mendoza se encuentra inmersa en una delicada situación en cuando a la disponibilidad de agua. Esto se debe a las escasas nevadas y al clima árido, aunque, en realidad, ambos conceptos van de la mano.

Lo cierto es que los principales ríos que traen el agua a la Ciudad están cada vez más vacíos o menos caudalosos. Ese es el caso del río Tunuyán que, como se ha explicado, es el que alimenta al dique El Carrizal. Esto hizo que, en el verano de 2020, el dique estuviera a un 35% de su capacidad, quedando restringidas las principales actividades como wakeboard, pesca y aventuras acuáticas en general. Como ocurre con los embalses de Mendoza, las funciones de El Carrizal son regular el río para tener agua de riego, como prioridad, generar energía y, luego, aprovechar el embalse para el turismo.