Ser Argentino. Todo sobre Argentina

Salinas Grandes: dejarse embrujar por un paisaje impresionante

Las Salinas Grandes de Jujuy están incluidas en la lista oficial de las 7 Maravillas Naturales de Argentina, te contamos por qué.

Las Salinas Grandes son un desierto de sal ubicado en el Norte Argentino, en la provincia de Jujuy. Frente a esta deslumbrante inmensidad blanca, serás subyugado por la extensión, que consiste en un hecho de una corteza de sal de 30 centímetros. El salar está a una altitud superior a los 4000 metros, lo que le da aún más encanto y originalidad. Para llegar a las Salinas Grandes de Jujuy, se debe tomar la RN 52 desde el aeropuerto de San Salvador de Jujuy, que te llevará a través de la ciudad de Purmamarca y un paso de 4170 metros sobre el nivel del mar. El pueblo más cercano es Abra de Potrerillo.

La belleza sorprendente del salar es lo que impacta en nuestras retinas al visitar este lugar excepcional Una inmensidad plana y blanca, tan pura que deslumbra, y que contrasta con el cielo azul. Un paisaje que sólo se puede imaginar en un sueño. Advertencia es importante llevar lentes de sol para protegerse de la poderosa reverberación. Si tenés tiempo, no te pierdas la puesta de sol en el lugar. Una vista extraordinaria donde verás tonos de rojo, azul y amarillo sobre la extraordinaria blancura del desierto salado.

No dudes en caminar sobre esta corteza de sal que se agrieta bajo tus pies produciendo sensaciones increíbles. Existe un servicio turístico que realiza un recorrido en vehículos por el salar. En el recorrido se tendrá la suerte de ver grandes agujeros en el suelo, que dan efectos sorprendentes. Es extrañamente una reminiscencia de lo que imaginamos que puede ser la Luna.

Las Salinas Grandes tienen diferenciadas claramente dos estaciones la seca y la húmeda. La primera va desde mayo a diciembre y es el momento perfecto para tomar las clásicas fotos creativas en perspectiva. Quien vaya a hacerlo debe llevar un trípode y algún accesorio que hará las veces de objeto en primer plano.

 

Por su parte la temporada de lluvias, que se extiende de enero a marzo, trae consigo otro punto de vista. A medida que la capa de agua se va acumulando sobre la sal le da al entorno un efecto de tipo espejo por lo que literalmente parece que se está caminando de nube en nube por el cielo. Por otra lado el color del agua es tan parecido al turquesa que emociona a quien lo mire.

 

Es importante saber que, durante el invierno, las Salinas Grandes son un lugar de trabajo ya que los obreros llegan a extraer la sal. En su trabajo forman pequeños montículos de este condimento tan apreciado por todo el mundo, para después cargarlo en camiones y llevarlo a los sitios de procesamiento. Ellos son los que causan la formación de las piletas naturales y agujeros de los que hablamos antes. Otro dato es la altitud (4500 msnm) a que se encuentran, entonces el paisaje está tan expuesto que se torna bastante ventoso y frío. Con lo que, desde Ser Argentino, aconsejamos llevar campera contra el viento y el frio para quienes se queden después de las 16:00.

 

Otro ítem para tener en cuenta es si el visitante es propenso al mal de altura o el apunamiento como dicen en el Norte Argentino. Porque de ser así el placer de conocer las Salinas Grandes pueden transformase en una pesadilla. En el viaje se atraviesa la Cuesta de Lipán a casi cinco mil metros de altura. Nuestra recomendación es tomarlo con calma y consultar un médico antes de ir para que prescriba algún medicamento ya que las hojas de coca o su te no a todos los organismos le producen el mismo efecto.

 

Si no lo hiciste te proponemos viajar a descubrir uno de los ambientes más interesantes y curiosos del Norte Argentino y no te olvides de dejar un comentario si ya has estado ahí.

Rating: 0/5.