El montañismo ofrece la posibilidad de vivir experiencias inigualables. Sin embargo, también nos enfrenta a las inclemencias del clima. Para poder disfrutar de las alturas con el clima frío es necesario tomar ciertas precauciones e interiorizarse de la exposición del cuerpo a bajas temperaturas.
Las partes del cuerpo que se congelan con mayor facilidad son pies, manos, nariz, orejas y cara. Los síntomas de congelamiento son los siguientes:
- Hinchazón y cambio de color de la piel (de rojizo a azul dependiendo de la gravedad).
- Adormecimiento y falta de sensibilidad en la zona afectada.
- Ardor, hormigueo, dolor articular y pinchazos.
Para prevenir esta situación, hay que utilizar la ropa indicada. También, vestirse con capas y utilizar materiales aislantes de buena calidad para evitar el contacto con la humedad y el frío. Es fundamental tener en cuenta la hidratación, ya que el estar deshidratados incrementa las posibilidades de congelamiento.
En caso de congelamiento de las manos, se recomienda ubicarlas bajo la axila o la entrepierna, y no frotar. En el caso de los pies, evitá caminar. Tomar bebidas calientes como té y café, siempre es una buena opción.
Licenciada en Comunicación Social y correctora. Nacida y criada en el oeste del conurbano bonaerense. Sagitariana, vegetariana, crossfitera y viajera. Estoy convencida de que, con las palabras, podemos hacer magia. Pasen y lean.