Buenos Aires: volviendo a los barrios

Buenos Aires es una ciudad diversa, con muchas experiencias para ofrecer. Cada vez son más los extranjeros que llegan desde distintas partes del mundo a recorrerla y se animan a ir más allá de los sitios clásicos. Retiro, San Telmo, Recoleta, Palermo, Puerto Madero, San Nicolás y Monserrat siguen siendo los barrios más concurridos, pero hoy el turismo busca algo diferente. Colegiales, Chacarita y Villa Crespo son las principales elecciones de quienes quieren conocer lugares alternativos.

De esta manera, el circuito clásico se amplía y otros barrios entran en el radar. ¿El motivo? Los turistas hoy se vuelcan por experiencias urbanas más autóctonas, menos comerciales, para poder sentir lo que es vivir como un local. Este interés viene de la mano del desarrollo de estos barrios, que hoy ofrecen ofertas culturales, gastronómicas y comerciales, como bares, librerías y restaurantes. Además, en los últimos años se viene dando una revalorización de lo histórico, de lo tradicional, de lo antiguo.

Buenos Aires cambió, pero el perfil del turista también: ya no se conforma con la foto en el Obelisco y en Caminito. Quieren ver cómo vive la gente del lugar, cuáles son sus costumbres. Conocer la historia, la esencia de la ciudad.

Colegiales, Chacarita y Villa Crespo

Colegiales, Chacarita y Villa Crespo, entonces, vienen creciendo en el último tiempo. Cada vez están más lindos, y cada vez atraen más gente. En Colegiales, por ejemplo, El Mercado de Pulgas es un imperdible, incluso para el que no planea comprar nada. Chacarita es un nuevo polo gastronómico, donde las nuevas propuestas se suman a las tradicionales, al igual que Villa Crespo que, pegadito a Palermo, ofrece un entorno más tranquilo y donde todavía se respira el barrio.

Habrá que salir de lo clásico, entonces, e imitar a los turistas y darse una vueltita por estos barrios.

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