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Esquel ofrece una propuesta turística basada en los cuatro elementos de la naturaleza

Rodeada de formaciones montañosas, lagunas y puntos panorámicos infinitos, la ciudad chubutense ofrece diferentes actividades y excursiones que permiten introducirse en este marco natural único.

Redacción

La ciudad chubutense de Esquel ofrece para Semana Santa una serie de actividades diseñadas en base al equilibrio de los cuatro elementos fundamentales de la naturaleza: aire, tierra, agua y fuego, "para que los visitantes tengan la oportunidad de disfrutar con propuestas al aire libre, deportivas, culturales y gastronómicas", informaron desde la Secretaría de Turismo local.

"Se trata de una receta basada en el equilibrio de esos cuatro elementos en un ambiente reconocido internacionalmente por su cordialidad y amabilidad, que llevaron a Esquel a ser elegida como el destino más hospitalario del país en el marco de los premios Traveller Review Awards 2022 de Booking.com", se destacó a través de un comunicado.

Aire
En lo respecta al primer elemento, el destino propone disfrutar del aire puro patagónico realizando Canopy en Pueblo Alto, con plataformas aéreas situadas en los árboles que llevarán a los visitantes por un recorrido total de 2 kilómetros, cuyo tramo principal es de 500 metros.
Además de volar sobre el tupido bosque de coihues y cipreses, en uno de los tramos se cruza por el aire un cañadón sobre el río Fontana, y para finalizar el día proponen un té de campo.
Durante el paseo se pueden divisar los picos nevados, altos valles y bosques en estos vuelos turísticos escénicos ideales para todo tipo de público.

Tierra
Por el elemento Tierra, la propuesta incluye la visita a un paraíso de abundante diversidad, situado a 15 minutos del centro de Esquel, donde se ubica la Reserva Natural Urbana Laguna La Zeta, un entorno natural compuesto por unas 1.100 hectáreas y una renovada red de senderos, donde se podrá disfrutar el silencio del bosque y las panorámicas de la Plaza de los Cerros.

Sumado a esto, el Parque Nacional Los Alerces, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en 2017, resguarda en sus 259.822 hectáreas una de las especies endémicas más longevas del mundo y una importante porción del bosque Andino patagónico.
Además, el Glaciar Torrecillas, portador de 24 mil años de majestuosa existencia y vestido de imponente blanco, ofrece a los turistas una postal inigualable de una encantadora laguna de intenso color esmeralda en la que flotan los bloques de hielo que se desprenden del glaciar.

 


Agua
El elemento Agua presenta una opción para los más aventureros, como el kayak de travesía, y la navegación por las aguas del lago Verde o las turquesas corrientes del Río Arrayanes.

 



Fuego
Para el último elemento, el Fuego, la opción es el viaje en La Trochita que, con el fuego en la caldera y el icónico sonido del silbato, ofrece durante 18 kilómetros un mágico viaje a través del paisaje cordillerano en dirección a la Estación Nahuel Pan.

 

 

"Finalizada una jornada a pura naturaleza, las chocolaterías artesanales de Esquel ofrecen en sus vitrinas las mejores combinaciones de sabores patagónicos, creados a partir de recetas familiares que forman parte de la historia de la ciudad", señalaron desde la Secretaría de Turismo.

Las pascuas son la excusa perfecta para degustar cada uno de los productos y variedades de gustos con almendras, nueces, maní, avellanas, castañas, pasas, ciruelas, higos, caramelo y menta, entre otros.

Rodeado de formaciones montañosas, lagunas y puntos panorámicos infinitos, "Esquel ofrece diferentes actividades y excursiones de cara a Semana Santa, que permiten introducirse en este marco natural único, conjugando el deporte con la travesía y la contemplación desde el corazón mismo de la Patagonia", subrayaron.

 

Fuente: Télam / Turismo Esquel

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