Hoy les voy a contar un poco de la relación entre alimentación y yoga.
Yoga una de mis pasiones.
Comencé a practicar yoga, sólo hace 7 años, fue un antes y un después.
Les cuento, que vengo de una familia de deportistas, mi padre atleta federado corredor de medio fondo, mi madre, jugadora de básquet, y mi hermana y yo atletas también federadas, heredamos la pasión de correr de nuestro padre.
Nos encantaba correr de chicas, mi viejo había marcado los 100, 200 y 400 mts en la plaza, donde íbamos a jugar, nos decía que lo había hecho para que sepamos los metros que corríamos (fanático yo). De yoga ni se hablaba...pero mi madre si practicaba yoga. Yo siempre fui de hacer actividades super pum para arriba, no me podía visualizar haciendo yoga.
Pasaron los años y veía a mi mamá saludando todos los días al sol, decir OM, pero yo siempre le decía ma! nunca voy a poder hacer eso!!! Necesito sentir la adrenalina en mi cuerpo…
Pasaron muchos años y por diversas situaciones de la vida, y por salud, una amiga Profe me dijo, Lily venite un día a probar. Y así fue, fui y me quedé.
Los principios básicos del yoga son también ejes que guían a nuestra alimentación. Practicar yoga nos lleva a una vida más sana y saludable. Preferir dentro de nuestra alimentación alimentos frescos, naturales, evitando los procesados, grasas saturadas, azúcares refinados. También es atención plena al momento de comer, poner toda la atención a ese acto, comiendo de manera lenta y equilibrada, masticando despacio, saboreando cada bocado evitando el estrés.
Por lo general se prefieren alimentos que procedan de la tierra, el sol y el agua, y si es orgánico o ecológico mucho mejor. No hace falta ser vegetariano o vegano para practicar yoga, lo que si facilita es a una digestión más ligera.
No hay una dieta o un plan yoguico!
Llevar una alimentación saludable es un efecto secundario del yoga.
La práctica de yoga te hace mucho más consciente, te despierta, y desconecta de ese piloteo automático que todos tenemos, te pone al mando del timón de tu vida. Cuando comenzamos a practicar yoga empezamos a conectarnos con nosotros mismos, nos observamos, y ya no funcionamos por inercia. Al aprender a observarnos, aprendemos a conectarnos con nuestro cuerpo de una manera natural, esto también ocurre con la alimentación, y comenzamos a preguntarnos porque comemos lo que comemos. Empezamos a escucharnos, a escuchar la voz de nuestro cuerpo, y lo que necesitamos para nutrirnos en cada momento.
Por eso siempre les digo desde mi lugar de Nutricionista, que el yoga es Mindfulnes, es recobrar la plena conciencia, y es sobre todo lo que hacemos, por lo tanto nos va a llevar a comer de manera conciente. (mindfuleating).
Pero la alimentación es tu elección, no vas a ser mejor yogui por comer carne o pescado, o por ser vegetariano o vegano.
La comida fresca, ligera y nutritiva, mantiene el cuerpo en forma y flexible, la mente clara y aguda y hace que ambos, el cuerpo y la mente, estén receptivos a la práctica del yoga.
“Somos lo que comemos” (Hipócrates).
Consultas por privado @lilys.farm, o a mi correo lili22@live.com.ar
- Licenciada en Nutrición, Profesora Nacional en Educación Física, Estimuladora Temprana, Especialista en Psicomotricidad, Masoterapeuta. Capacitadora libre de Gluten (GCBA). Ex. Lider de la Liga Internacional de la Lactancia.
- Su labor profesional como Nutricionista se enfoca en búsqueda de hábitos de alimentarios saludables, en adolescentes, adultos, deportistas, instituciones, empresas. Enfermedades autoinmunes.
- Coordina Talleres de educación alimentaria, abarcando distintas problemáticas actuales. (Trastornos alimentarios, alimentación libre de gluten).
- Trabajos individuales y grupales de entrenamiento Físico.