El Gran Capitán

A casi 10 años de su último viaje, no hay persona en el Litoral que no extrañe al famoso tren, más conocido como el Gran Capitán. Por alguna razón, a los argentinos nos toca en lo profundo del corazón la temática de los ferrocarriles en nuestro país. Será tema para especialistas, pero cuando vemos una de esas mega máquinas abandonada en el medio de una estación ferroviaria se nos cae un lagrimón.

El Gran Capitán fue como se conoció popularmente al ferrocarril de la línea Urquiza que conectó toda la Mesopotamia. Partía de Buenos Aires hacía Posadas, en la provincia de Misiones. Para llegar, debía cruzar las provincias de Entre Ríos y Corrientes, uniendo en el camino más de 50 localidades.

Esta línea de tren tiene una larga historia. En los papeles fue constituida en 1949 y fue dada de baja con honores en 2011. El emblemático ferrocarril tuvo sus etapas. En las primeras décadas hacía un cruce épico en barco desde Zárate hasta Ibicuy, y viceversa. Pero solo duró hasta la década del 70, cuando el ferry fue reemplazado por el Puente Ferrovial Zárate-Brazo Largo.

Entre historias, recuerdos y anhelos

Con el pasar del tiempo, el Gran Capitán se fue haciendo más lento. El poco mantenimiento de las vías, sumado a gobiernos corruptos, llevaron al gran tren argentino a contraer fatiga. Cada vez tardaba más en arrancar y en llegar a la siguiente estación. Hacia mucho ruido o demasiado poco, siempre era mala señal. “El tren no sale hoy”, decían; “¿cuándo vamos a llegar mamá?”, preguntaban los niños cansados de tanto viaje. 

Sin embargo, el recuerdo de la gente sigue intacto. Cada pasajero que tuvo la suerte de abordarlo tiene una historia para contar. Y, sin dudarlo, añoran esos tiempos más lentos de ferrocarril. La esperanza siempre sigue viva. ¡Algún día el Gran Capitán tiene que volver! La más mínima señal alcanza para despertar los corazones de los litoraleños.

¿Vuelve el Gran Capitán?

Nada mejor que ilustrar el deseo de los argentinos por un pronto retorno que una anécdota inolvidable. Cuando el Gran Capitán llevaba 6 años sin funcionar, un grupo de turistas ingleses decidió viajar desde Posadas a Buenos Aires en un tren alquilado. Entonces, una pequeña locomotora privada se puso a su servicio para trasladarlos.

A medida que la locomotora avanzaba por las vías, cientos de personas salieron a recibirla en la estación. En las ciudades y pueblos se había corrido el rumor de que volvía el Gran Capitán. El malentendido generó que las terminales de ferrocarril se colmaran de gente con globos y banderas. En la ciudad de Posadas, cientos de personas entonaron el himno nacional argentino en honor al Gran Capitán.

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