Hola, ¿está Leo? La historia del argentino que le tocó el timbre a Messi en París

Debe ser difícil mantener los pies sobre la tierra cuando millones de personas alrededor del mundo te idolatran. Sin embargo, muchas veces nos olvidamos de que, antes que nada, nuestros ídolos son personas. Sucede que depositamos en ellos admiración infinita, sueños, expectativas, alegrías, y los cargamos con cualidades que nos hacen sentirlos muy lejanos. Conocerlos en persona, entonces, se convierte en nuestro mayor anhelo. La historia de Matías nos demuestra que nada es imposible: aprovechó un viaje a París y le fue a tocar timbre al mismísimo Lionel Messi. Enterate qué pasó.

Matías Rojas es santiagueño y peluquero. Y tiene un fanatismo loco por Leo Messi, a quien considera el más grande para los argentinos en la actualidad. Recientemente, tuvo la posibilidad de viajar a París para participar de un certamen internacional de peluquería y no lo dudó. Decidió que era ahora o nunca, se la jugó y se acercó a la casa de Messi con la intención de conocerlo.

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El primer intento fue frustrado: al llegar a la vivienda en el auto de un amigo que lo acompañó hasta allí, un guardia de seguridad le indicó que ni Leo ni su esposa Antonela Roccuzzo estaban en la residencia. Pero Matías no se dio por vencido. 

Volvió a intentarlo, pero esta vez tuvo que acercarse en bicicleta. Pedaleó más de 10 kilómetros por la ciudad francesa y llegó por segunda vez a la casa de su ídolo. Hizo lo más simple que podría haber hecho: tocó el timbre. Aunque nadie respondió a la puerta, él se quedó esperando y, unas horas después, llegó Antonela. 

Ella lo recibió con amabilidad y le explicó que Messi estaba de viaje, jugando un partido del Paris Saint-Germain en Israel. Le indicó que podía regresa dos días después, que Leo ya estaría en casa. Matías le dejó un regalo para su ídolo: un bombo intervenido con la foto de la Pulga. La esposa del jugador lo recibió y le agradeció mucho el gesto. Finalmente, se sacaron una foto juntos.

Sueño cumplido

Matías cada vez estaba más cerca de cumplir su sueño y no se iba a rendir. Un par de días después, se acercó por tercera vez a la casa de Leo Messi, con la ilusión de, por fin, conocer en persona a su ídolo. Luego de esperar unas horas en la puerta, el rosarino finalmente llegó a su casa. Sin que él hiciera nada, el jugador del PSG se acercó a su fan y lo recibió con mucha calidez.

Messi hizo pasar a su invitado inesperado al garaje de su casa, donde estuvieron charlando un poco. Matías destacó la humildad de Leo y lo cercano que lo sintió. Se abrazaron y se llevó el souvenir más preciado por cualquier fanático del fútbol y de la Selección argentina: una camiseta firmada por Lionel Messi.

Y así se fue Matías, feliz de haber conocido, al menos un poco, a la persona detrás del ídolo. Y convencido de que los sueños están hechos para cumplirlos. ¿Tocarle el timbre a Messi? Lo que parecía una locura terminó siendo uno de esos momentos que atesorará hasta el final de sus días.

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Imágenes: IG Matías Agustín Rojas