Cristian Firmapaz y su camioneta todoterreno

En una época donde las reparaciones en diversos objetos cotidianos son parte de nuestras vidas, se ha viralizado un vídeo que ha ocurrido en los últimos días de diciembre en las playas de Las Grutas, provincia de Río Negro. Nada tiene que ver con el coronavirus o con porcentajes de ocupación con la temporada 2020 / 2021, de la cual será igual de atípica como esta acción: una camioneta F-100, sin ni siquiera capó y con varios años de uso, se hacía espacio y camino entre la arena, las rocas y el agua que iba subiendo.

Una camioneta Ford F-100 de 46 años no quedó varada y sí varias nuevas camionetas, cuatriciclos y otros medios de transportes “típicos” de playa: es que todo comenzó con una 4x4 atascada y con otros varios vehículos yendo a su rescate. De repente, se escuchó un sonido particular y por fuera de lo habitual de la nueva generación de automóviles: esta “chata” se hacía paso en pleamar para llegar a tierra (más) firme.

Aunque se reconoce que esta actividad, la de bajar a la playa con vehículos, está prohibida, es normal ver personas -más que nada locales- que la realizan; el conocimiento del terreno particular del balneario rionegrino es primordial para no sufrir consecuencias y quedar varado cuando empieza a subir la marea.

El dueño de este viejo fierro entre las olas es Cristian Firmapaz y es recolector artesanal de pulpos: aunque las redes sociales hicieron lo suyo para una viralización y apoyos a esta camioneta, para él es algo habitual. En una nota periodística sobre lo sucedido, comentó que le empezaron a llegar mensajes por ser “famoso en Facebook”: después de un largo día pulpeando, él sabía cómo tenía que sortear la orilla de El Sótano, una de las tantas playas que componen una de las ciudades más importantes de la provincia patagónica.

Cristian es parte de una tradición familiar, dado que sus padres, sus tíos y ahora junto a otros familiares realizan este trabajo estacional: ya que los pulpos se arriman a las orillas entre noviembre a abril, mayo a más tardar. Una actividad, además, que demanda horas y horas debajo del sol veraniego. Antes de que salga, ellos ya están ubicados, gracias a su camioneta que lo acompaña siempre. Relata que pocas han sido las veces que lo ha dejado a pie, y que cualquier inconveniente, lo arregla él. No solo la F-100 es todo terreno, sino que también su dueño.

El conocimiento de Cristian hizo también que, como se ve en el video, esté todo calculado “milimétricamente”, ya que va realizando zig zag. Que la pleamar no haya sido tan enérgica (pueden llegar a los dos metros de altura del barranco y hace imposible que se pueda avanzar) ayudó. Firmapaz comenta que un cambio mal puesto o un error del conductor, puede ser una catástrofe. “Le pasó a un conocido que se le paró el motor y lo tapó el mar. Tuvo que desarmar completamente la camioneta. Lavarla bien con agua dulce y abrir el motor, porque le entra arena”, relata. 

El video llegó a millones de reproducciones en las diferentes redes sociales, no solo en Facebook: Twitter, Instagram y hasta grandes medios de comunicación nacional e internacional. Hasta le han escrito de otros países para felicitarlo. Así, una de las típicas actividades veraniegas del balneario Las Grutas ha llegado a boca de miles y miles personas; por un momento, las personas se han olvidado de una pandemia, de las dificultades económicas y sociales que ha ocasionado este nuevo virus y han festejado de forma colectiva un logro que, para Cristian Firmapaz, es algo cotidiano.

Pero la historia no termina allí: desde Ford, se comunicaron con nuestro pulpero favorito para ofrecerle restaurar su camioneta y, mientras eso ocurre, prestarle otro vehículo para que continúe realizando su trabajo.