En Maquinchao (Río Negro), el gesto de Antonella sigue estando en la boca de todo el pueblo. Y es que, ante el mal momento de su vecina, la pequeña rionegrina mostró que tiene un gran corazón solidario.
Hace algunos días, Andrea Pichifilo perdió su billetera cuando salió a hacer algunas compras por su barrio. En ella, llevaba su tarjeta de débito nueva y un papelito con las claves de acceso para no olvidarlas. Lamentablemente, sus pertenencias cayeron en manos de una persona poco honesta que, en vez de devolvérsela, aprovechó la información para quedarse con todo el dinero de la vecina de Antonella. Y, cuando decimos todo, ¡es literalmente todo! El casual ladrón de pueblo no solo se quedó con el efectivo que había dentro de la billetera, sino que también extrajo del cajero el sueldo completo de esta asistente odontológica.
La historia de la vecina que conmovió a la pequeña
Andrea es parte del staff del Hospital Dr. Orencio Callejas de Maquinchao, una localidad rionegrina con 2500 habitantes. Como muchas otras mujeres, asume la crianza de su hijo sola, y el sueldo como asistente es su principal sostén de hogar y crianza. Si bien reconoce que no vive mal, y que recibe la cuota de alimentos del padre de su hijo, ahorrar le cuesta mucho porque les alcanza para lo justo.
Ante el arrebato de sus ahorros, Andrea decidió realizar la denuncia. Como en todo pueblo, la noticia corrió muy rápido, y pronto los vecinos se enteraron de lo ocurrido. Ese mediodía, fue el tema de sobremesa en la casa de la familia Torres. La pequeña Antonella, de 7 años, escuchó con mucha atención lo que le había sucedido a su vecina y, en silencio, se conmovió con el relato.
Cuando la inocencia llama a la puerta
Esa misma noche, la pequeña decidió romper su alcancía y sacar sus ahorros para solidarizarse con su vecina. Tomó el celular de su papá Sergio, para alumbrar su paso hasta la casa de Andrea. Como no encontró a nadie en su casa, dejó su donación y, bajo una piedra, una nota: “Vecinos, qué malo que les hayan robado y por eso les traje plata. Era todo lo que tenía. Anto".
Conmovida por el gesto de la pequeña, Andrea decidió escribir un mensaje de agradecimiento en las redes sociales. En ese momento, los padres de Antonella se enteraron de que su hija había cometido una picardía solidaria y llena de amor.
Laura, la mamá de Antonella, decidió interrogar a la pequeña para consultarle sobre lo ocurrido. Recibió de ella una respuesta sincera e inocente que la dejó sin palabras: “Solo quería hacerla feliz”.
Te sugerimos continuar leyendo las siguientes notas:
Ramoncito, un vecino solidario que hace changas para ayudar a los demás 
"Codo a Codo" 
Madrynense y argentina. Lic. en RRPP (UP), especializada en Comunicación e Identidad Corporativa (UNIR) y docente universitaria. Apasionada por la comunicación en todas sus expresiones, porque como dice Paul Watzlawick “Todo Comunica”… las palabras, las reacciones y nuestro cuerpo. Mi desafío profesional es cuidar de “ese todo”, aportando mis conocimientos y gestionando las herramientas necesarias para que las comunicaciones fluyan como las olas del mar.