Los analistas deportivos de la televisión argentina merecería una miniserie en alguna de las nuevas plataformas digitales, hegemónica conducta donde lejos de buscar un sereno análisis sobre los hechos ocurridos, los involucrados en esa industria mediática exponen una conducta triunfalista que parece un turbulento eco de varias situaciones que guardan relación con ciertos comportamientos patrióticos de una guerra desigual. Llegó el esperado sorteo del "Mundial Qatar 2022” y apenas se conoció la zona y quienes serán los rivales del seleccionado argentino, pareció haberse iniciado una olímpica carrera para ver quién dice la burrada más exagerada en cuanto a pronósticos deportivos. Si nos guiáramos solo por las apreciaciones de ciertos extremistas que jamás pisan el freno en sus análisis, a esta altura de los acontecimientos habría que preguntarse de forma imperturbable, ¿por qué el conjunto dirigido por Lionel Scaloni debe viajar a los Emiratos Arabes, si ya ganó este campeonato que recién se jugará a mediados de noviembre? La inconmensurable locura y diversas psicopatías que aparecen en las cercanías de un campeonato mundial, despiertan en los especialistas deportivos esa andanada de declaraciones para la hinchada desprovistas de precaución, cautela o cierta austeridad evitando dejarse llevar por esa gran ola de triunfalismo, perfil que recién finaliza cuando las cámaras muestran que Messi y su equipo de acompañantes miran el pasto, sabiendo que tienen que hacer las valijas porque el torneo para Argentina se terminó antes de lo previsto.
Lo que sucedió el viernes 1 de abril en Qatar, cuando los organizadores concretaron luego de un insufrible acto inaugural el tan esperado sorteo de los grupos en que estará dividido el Mundial 2022, fue una clara repetición de conductas que el público que sigue muy fiel al equipo argentino debería ignorar inmediatamente, para no sufrir luego las contundentes desilusiones que acontecen justamente cada cuatro años, cuando la selección de fútbol en la nación organizadora padece graves y devastadoras derrotas que todos los analistas del área no habían contemplado anteriormente. Argentina conoce a los equipos que enfrentará durante los primeros doce días de competición en la Zona C, una etapa destinada para que las selecciones logren su pasaje en primer o segundo lugar a los octavos de final, un grupo que hallará al equipo de Lionel Scaloni debutando el martes 22 de noviembre a las 16:00 (hora argentina) ante Arabia Saudita en el estadio ubicado en Lusail. Yendo en contra del inagotable coro de aduladores que indica que la blanquiceleste goleara sin turbulencias al equipo saudí, lo importante es que nuestra selección no subestime al supuesto equipo con menos técnica de la zona, porque jugados por jugados, los árabes podrían salir a un todo o nada, sabiendo que igualmente no saldrán victoriosos. Subestimar en el debut al conjunto de ese contexto geográfico, sería una locura imperdonable, más cuando viene muy veloz a la memoria esa horripilante derrota frente a Camerún en 1990 durante el partido inaugural del campeonato mundial jugado en Italia.
Cuatro días después la selección de nuestro país enfrentará a México, equipo al que viene venciendo en todos sus encuentros mundialistas. El sábado 26 de noviembre a las 10:00 (hora argentina), en el estadio Education City de Doha, el equipo blanquiceleste tendrá al conjunto azteca en otro desafío mundialista de enorme dificultad, pues la selección de ese país que dirige el “Tata Martino” buscará acentuar su estrategia en los puntos flojos que el conjunto dirigido por Scaloni sigue mostrando en sus últimos compromisos, un partido de vital y decisiva importancia para saber en que situación llegará nuestro seleccionado a su último match para pasar a la siguiente etapa competitiva. Los cuatro días de descanso tras su primera presentación en suelo qatarí contra los árabes saudíes, servirán especialmente para que el entrenador argentino acomode un once ideal frente a los aztecas, evaluando la respuesta física de aquellos que intervengan en el debut mundialista, como también mirar si determinadas estructuras no se vieron resentidas en el arranque del campeonato, dando a otros jugadores la chance de ponerle aire fresco y renovación en un partido donde todos anticipan que el desgaste físico sin dudas será el más elocuente de todos los contemplados en esa ronda inicial. Aún habiendo salido victorioso de sus duelos con los mexicanos, las motivaciones jugarán un peso importante, porque no será lo mismo buscar la clasificación con un equipo herido en el debut, que hacerlo frente a una selección que tenga chances por ese tramo de la competencia de arañar la clasificación, rasguñando puntos en cada partido que contempla el Grupo C del torneo mundial.
El miércoles 30 de noviembre a las 16:00 (hora argentina), Argentina cerrará su primera etapa de partidos contra la selección de Polonia y muchos suponen que para ese momento del torneo la selección blanquiceleste tendrá el pase a la siguiente etapa. Como Scaloni y sus dirigidos no querrán jugar los octavos de final con un equipo candidato al título, todo hace pensar que en ese partido se dirimirá la primera posición del Grupo C, un duelo con los polacos que hace pensar en un partido con mucho desgaste físico, bastantes foules por el mediocampo y pocas situaciones de gol, sin descuidar aquellos ataques rivales donde la pelota llegue a Lewandowski, goleador del fútbol europeo que intentará convertirse en la estrella de las redes en la competencia qatarí. La Selección Argentina, si llega clasificada a esa última batalla del grupo que le tocó integrar, podría salir a jugar con una formación de tono alternativo para guardar a los mejores en el duelo de octavos de final, pero si aún los resultados permiten múltiples hipótesis sobre clasificar o no, naturalmente el técnico de la selección mayor de fútbol pondrá en la cancha a los mejores, para no dejar nada librado al azar, sabiendo que un error en ese encuentro podría costarle algo más que un simple dolor de cabeza. Scaloni tendrá precisiones estratégicas 48 horas antes que arranque el mundial, apenas sepa cómo está todo el plantel anímica y físicamente, entendiendo que durante ese torneo el desgaste físico jugará un papel decisivo en la respuesta de sus jugadores.