¡Escribí! Notas de Lector
Ir a la secciónBuenos Aires - - Sábado 28 De Enero
La frase clave en el momento preciso puede desencadenar tormentas. A veces, incluso, ni siquiera hacer falta una palabra: una simple interjección puede hacer que todo estalle. Veamos un ejemplo.
Un grupo de amigos está compartiendo un momento cualquiera. Entre risas y chistes, el desubicado de siempre dice eso que no tiene que decir sobre el calentón perpetuo, quien –en un primer momento– trata de no reaccionar por demás ante lo que intenta ser una burla amigable. Pero un tercero (o dos o tres) emite ese sonido que todo lo cambia: “Uhhhh”.
El sentido es claro y no hace falta ponerlo en palabras. La frase completa sería “uhhhh, ¡mirá lo que te dijo!”. Y entonces el aludido ya no puede hacerse el tonto, porque significa que no solo él tomó como ofensa la ofensa y que no solo el que la dijo está esperando su respuesta: ahora tiene a todo el grupo callado y pendiente de su próxima reacción.
El desenlace puede ser variado, dependiendo de la gravedad del ataque y de los protagonistas en cuestión, pero lo que nunca cambia es la clara intención de provocar pelea detrás de un sonido en apariencia inocente. Desde ya, cada grupo tiene su propia dinámica, pero ese uhhhh es inevitablemente argentino.
Fecha de Publicación: 19/04/2018
¡Escribí! Notas de Lector
Ir a la secciónNo hay comentarios
Comentarios
Hace medio siglo la Ciudad Feliz mostraba una singular vida turística, tiempos donde gran parte de l...
El escritor y abogado Francisco Javier de Antueno presentó un extenso trabajo, obra donde figuran la...
A principios de los ‘70s, la “Ciudad Feliz” ofrecía una impactante cartelera de lugares para comer d...
Un artículo sobre la salud mental de quién marcó un antes y después en la pediatría argentina. Fecha...
Suscribite a nuestro newsletter y recibí las últimas novedades