Nos encontramos en el gimnasio. Una mujer de tez blanca y franca mirada. Sus rasgos europeos y su acento inglés confunden y distraen a quien se acerca a hablar con ella y se entera de que está conversando con una geisha. Rompe el estereotipo que uno tiene de estos personajes.
“Sayuki es mi nombre de geisha y significa ´felicidad transparente’. El personaje Yuki es del nombre de mi madre geisha, Yukiko. Y lo combiné transparente para hacer mi nombre”, explica la mujer quien, al ser consultada por su edad, explica que “una geisha nunca revela su edad”.
Nuestra entrevistada nació en Australia, pero se instaló en Japón a temprana edad. “Crecí en parte en Japón desde los 15 años yendo a escuelas japonesas y viviendo con una familia japonesa”. Consiguió la residencia, que es algo fundamental para desempeñarte en ese país: “Necesitas tener una residencia permanente o la nacionalidad japonesa para ser una geisha. La geisha no se casa tradicionalmente y es muy difícil para las mujeres solteras obtener la residencia permanente”.
Sayuki ha entrado en la historia de Japón: “Soy una geisha en Japón. Soy la primera mujer blanca en convertirse en geisha en la historia japonesa. La gente a menudo me pregunta si ese mundo se está abriendo ahora, pero en realidad no se abrirá pronto por la necesidad de los papeles”. Ella supo meterse en el mundo de las geishas: “Hace 12 años que soy geisha y tengo mi sede en el distrito de Fukagawa en Tokio, el distrito de geishas más antiguo de Japón”.
¿Qué es una geisha?
“Geisha significa literalmente ‘artista’ y todas las geishas son bailarinas o músicas, o ambas. Las geishas a veces actúan en un gran escenario, pero principalmente nuestro trabajo es entretenimiento privado. Es un poco como llamar a una bailarina a tu fiesta privada, hablar con ella durante una cena tradicional y luego poder ver una actuación privada solo para ti y tus amigos”.
Sobre Argentina y la calidez de su gente, saca conclusiones positivas: “Viajando sola, muchas personas se han esforzado por ser serviciales y agradables conmigo”. Y en cuanto a sus comidas favoritas, aun estando en el extranjero, se mantiene en sus gustos personales: “Amo la fruta fresca y todas las verduras, y el sushi, por supuesto. Tenía un poco de miedo de que Argentina fuera un país tan carnívoro, pero Mendoza tiene algunos excelentes restaurantes buffet de almuerzo con muchas opciones vegetarianas”.
Al ser consultada sobre nuestros lugares turísticos y paisajes, Sayuki confiesa que, en gran parte, vino a Mendoza por el cerro Aconcagua: “Los paisajes son muy hermosos aquí. Fui al campamento 3 en Aconcagua, casi hasta la cima. El valle que baja del campamento base es tan inmenso. Estuve caminando casi toda la tarde sin encontrarme con otra alma, sola perfectamente en la inmensidad del paisaje”.
Sin embargo, sobre la experiencia de subir el Aconcagua, se lleva el recuerdo de los altos precios: “Es muy costoso para los turistas: demasiado caro, y una diferencia demasiado grande en el precio de entrada entre turistas y lugareños”.
Actualmente, Sayuki viaja por Sudamérica y está disponible para dar charlas sobre el mundo de las geishas o para actuar en restaurantes japoneses u otros lugares. Su contacto es sayuki.geisha@gmail.com.
Argentino, mendocino. Licenciado en Comunicación Social y Locutor. Emisor de mensajes, en cualquiera de sus formas. Poseedor de uno de los grandes privilegios de la vida: trabajar de lo que me apasiona. Lo que me gusta del mensaje escrito es el arte de la imaginación que genera en el lector. Te invito a mis aventuras.