Aunque no nos hemos tomado el trabajo de realizar la encuesta que daría sustento empírico a la siguiente afirmación, consideramos que el sentido común sirve de argumento para decir que 8 de cada 10 mendocinos siguen a la cuenta Chapanay City en sus redes sociales. Se trata de un grupo de personas, con creatividad y rapidez mental, que le ganan a cualquier persona a la que se le ocurre un chiste sobre alguna situación cotidiana.
Sus inventores son Eduardo, profesor de Educación Física (26), y Martín, estudiante de Diseño Gráfico (24). Ambos, son originarios del distrito Chapanay del departamento San Martín. Con singularidad, humor original y mucho regionalismo, el sitio suma miles de seguidores en todo el país. Facebook (chapanaycity): 360 mil, Instagram (@chapanaycity): 88 mil y Twitter (@chapanaycityok): 14.500.
Algunos sucesos curiosos en torno a esto es que, por ejemplo, muchos seguidores piensan que “Chapanay” es un nombre ficticio, que no existe. Sin embargo, se trata de un distrito de uno de los departamentos más importantes, aunque claro, no deja de ser un pueblo de apenas más de mil habitantes y que, seguramente, en los últimos años ha cobrado más fama que en toda su existencia a raíz de este fenómeno.
El clásico
Si bien los chicos de Chapanay City hacen memes y chistes basándose en cualquier cosa, Los Simpson son un tema recurrente, pero no por eso menos desopilante. La tradicional familia americana aplica y genera empatía con casi cualquier hecho de nuestra vida y estos inventores se encargan de retratarlo en sus memes. Tal fue el caso de, por ejemplo, la promoción que hicieron para la fiesta que ellos mismos organizaron. En ese caso utilizaron casi 6 minutos de un capítulo de Los Simpson, escribieron un guion y le pidieron a un mexicano que grabara las voces para que los mismísimos personajes te invitaran a la fiesta. Incluso Homero y compañía llegaron a mencionar palabras tan mendocinas como “culiao…” u otros lunfardos.
Argentino, mendocino. Licenciado en Comunicación Social y Locutor. Emisor de mensajes, en cualquiera de sus formas. Poseedor de uno de los grandes privilegios de la vida: trabajar de lo que me apasiona. Lo que me gusta del mensaje escrito es el arte de la imaginación que genera en el lector. Te invito a mis aventuras.