¡Escribí! Notas de Lector
Ir a la secciónBuenos Aires - - Miércoles 18 De Mayo
Las firmo N Cambre. Probé de varias maneras en el transcurso de los últimos años y con esta me sentí más identificada, finalmente.
Brindarse.
Amarse a uno mismo, ¡desde ahí se puede recibir todo!
No hay límites, lo importante es que la obra genere algo profundo en quien la observa. Puede ser algo lindo o no tan lindo, pero el arte moviliza, emociona, te hace pensar, observar, detenerte a disfrutar...aunque sea por un rato.
100% autodidacta.
Sí, siempre pinte abstracto. Me gusta mucho ver como cada observador ve cosas diferentes en mis cuadros, entonces la obra termina siendo de a dos.
Es increíble pero el 80 % de mis cuadros están realizados con la misma paleta. Me gustan los rojos, verdes aguamarina, naranja, fucsia… me siento muy cómoda con esos tonos.
Porque aumentan el abanico de posibilidades y mucho. Aparte con colores se pueden generar emociones que con blancos y negros difícilmente se llega.
Tengo una, no sé si manía pero algo que me pasaba cuando empecé a estar presente en el mundo del arte. Siempre me gustó mucho pintar. Al principio, cuando me fui a vivir sola a los veintitrés años, comencé a dar pinceladas a lienzos mirando todo lo que se me cruzaba en el camino (se ríe). También lo que literalmente me topaba: pintaba mesas, heladeras, puertas, telas, lámparas, bandejas ¡y hasta teteras! Llegué a realizar cosas por encargo de amigos y yo feliz ya que eran pedidos a la artista que nacía en mí. Es una sensación sublime porque de esos "pedidos caseros" se gesta el artista que se muestra a pleno más tarde ¿cierto? ¡Encima me pagaban!
Sí, tengo algunos adornos muy queridos en mi casa. Otro día te los muestro, (me confiesa casi en secreto). (Y se anima...) tengo una puerta escondida. La conservo – entre otras cosas- porque es la puerta de mi adolescencia, sus colores, su textura, sus sombras. Es mi puerta, mi yo en ese entonces. Más todo lo que significa una puerta (vuelve a reírse como la hace quien sabe que se viene la pregunta Freudiana pero no se la voy a hacer; es demasiado obvia).
Pinto en un rincón de mi casa donde me armé un taller, es mi refugio preferido, me encanta; cuando estoy ahí y me dispongo a crear, todo se vuelve mágico.
Creo que ambas; hay que desarrollarse, ya sea con capacitación o con mucha práctica: pintar, pintar, pintar…
Tener un taller grande en mi propia casa; me gusta experimentar con otras técnicas y utilizar diversos materiales; también reciclar. Para eso, necesito espacio. Pronto se me va a dar.
¡Tantas cosas! Estoy muy agradecida con mi vida.
Las preocupaciones.
Soy productora, divido mis días entre las 2 actividades las cuales amo de igual manera.
Miro una de sus tantas pinturas, me llama la atención una en particular: turquesas intensos se abrazan a colorados, naranjas y un imperceptible blanco.
Me voy a casa con la imagen de una flor laberinto.
Fecha de Publicación: 16/01/2021
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