Investigando sobre los deliciosos kebbes, descubrí que hay un dato curioso sobre la inmigración de origen sirio y libanés en Argentina. Cuando se habla de los descendientes de sirios y libaneses en este país, se los suele asociar con el noroeste. Las provincias de Salta, Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero y La Rioja son citadas muy a menudo al hablar de la comunidad árabe. En efecto, fueron numerosos los inmigrantes del Levante que se establecieron allí. Sin embargo, quienes estudian estos temas aseguran que, numéricamente, no hubo más personas de esta proveniencia en esas provincias que en la de Santa Fe. Es más, de los muchos que se instalaron en la gran Rosario a principios del siglo XX, se caracterizaron por una atípica convivencia con las comunidades judías.
Así, la calle San Luis de Rosario es característica por su perfil comercial, compuesta de tiendas casi exclusivamente pertenecientes a descendientes de sirios, libaneses y personas de religión judía. En este barrio había un plato típico del mundo árabe, que aún hoy se puede ver con frecuencia en las mesas rosarinas. Son los kebbes. Se pronuncia kepes, pues la “b” no se expresa en el lenguaje tradicional. Quienes elaboran esta receta, disfrutan de un trabajo acompañado de pasión y de amor hacia la tradición sirio-libanesa. De este modo, honran a sus mayores, para quienes preparar los kebbes significaba un festín compartido con todos los parientes. Estos descendientes del mundo árabe cocinan y, a la vez, mantienen sus tradiciones. Desde el momento en que se busca el delantal de cocina y se sujeta en su cabeza un turbante envolviendo cuidadosamente el cabello, como lo hacían sus antepasados. Todo ello pone de manifiesto el valor que transmitieron los sirio-libaneses en cada receta. Los honramos con esta, la de los deliciosos kebbes.
Ingredientes
- 1 kg de carne molida
- 300 g de grasa peya, también molida
- 500 g de trigo burgol molido fino
- 2 cebollas blancas
- 2 cebollas de verdeo
- 1 morrón
- Ramitas de menta
- Sal, pimienta y manteca a gusto
Preparación
Poner el trigo en remojo durante dos horas, como mínimo.
Pisonar la carne en un mortero.
Escurrir el trigo e incorporarlo a la carne.
Procesar las cebollas, el morrón y la menta. Reservar la tercera parte para incorporarla a la grasa peya.
Incorporar los ingredientes procesados a la mezcla de carne y trigo. Condimentar con sal y pimienta a gusto. Amasar la preparación hasta que no se despegue de las paredes del mortero.
Realizar bollitos, trabajándolos de mano en mano, para luego ahuecarlos. Rellenar con un poquito de grasa peya (a la que se le habían agregado los ingredientes procesados), cerrar y darles forma de hamburguesa, aunque no deben quedar chatos como estas.
Acomodar prolijamente los kebbes sobre la parrilla engrasada. Echar brasas, preparándose el fuego de la misma manera que para un asado a la parrilla. Cuando los kebbes se despeguen de la parrilla, se procederá a darlos vuelta, para continuar su cocción.
Tiempo de cocción: cuarenta y cinco minutos aproximadamente.
Pincelar con manteca derretida y servir.
Variante de los kebbes crudos
Se utiliza la misma masa del kebbe cocido. Pero hay que colocar la preparación en un plato, marcarla con cuchillo y rociarla con aceite de oliva. Luego, agregar cebolla de verdeo cortada bien finita.
En todos los casos, servir acompañando con pan fresco.
Argentino, nacido en la ciudad de Santa Fe. Licenciado en Comunicación Social, especializado y apasionado por la redacción. Amante de las canciones, los idiomas y la interculturalidad. Me gusta emocionarme con un lindo texto y dejarme sorprender como un niño. Juego a que soy escritor y músico.