¿Por qué existe la botella de vino de 500 cc?

Hacia el año 2000, la Bodega Trapiche lanzó una singularidad en el mercado: vino en botella de 500 cc. Por ese entonces, pocas bodegas envasaban algún ejemplar en recipiente pequeño y generalmente, la que lo hacía, era de 375 cc para los restaurantes. Además, eran vinos del tipo de mesa, pensados para cubrir la necesidad de quien solo podía permitirse acompañar la comida con una copa.

El lanzamiento de Trapiche fue un Syrah Reserva de medio litro. En aquel momento se supo que era una buena partida con muy poca producción, se optó por esta presentación para lograr un mejor rendimiento. La sorpresa fue que el público acogió muy bien su contenido y su cantidad: era un envase que permitía compartir cómodamente entre dos comensales una buena cantidad sin pasarse de una cuota razonable de alcohol. Fue entonces cuando la bodega decidió continuar su producción.

Diez años después le siguieron otras bodegas como La Rural y Zuccardi, entre otras. Parecía que era el boom de la botella de medio litro, pero su venta comenzó a decaer y se descontinuaron.

Palabras aparte merece el contenido envasado. Es un muy buen representante de su cepa. El color violáceo y rojo fuerte, aromas a frutos negros, buen ribete y lágrima por su paso por roble y final prolongado determinan el equilibro encontrado por la tradicional marca. Es un vino carnoso, con aromas a regaliz, tabaco y chocolate, de sabor intenso a moras su persistencia es larga y amable.

Hoy, a casi 20 años de su lanzamiento, Trapiche sigue produciendo su Syrah Reserva de 500 cc, siendo casi la única botella con vino de gama media que encontramos en esta presentación.