El lomito cordobés es el deleite del paladar de muchos. En esta ciudad, comer un lomito es todo un ritual. El momento de la semana en que podemos salir a cenar, o nos damos el gusto de pedir un delivery, está protagonizado por este sándwich. Y es mucho más que un sándwich, es juntadas con amigos, festejos por logros y metas, es celebrar. Esta comida está conformada por la combinación perfecta de pan (preferentemente casero), lomito, lechuga, tomate, huevo, jamón, queso y mayo. Cada restaurant lo hace a su gusto y, lógicamente, le pone su toque especial. Pero hay una condición que sí o sí se debe respetar: la mayonesa tiene que ser casera. Con sus variantes: ajo, provenzal o sin agregados, la mayonesa es el constituyente fundamental del lomito. Es por eso que cada rotisería tiene sus secretos bien guardados.
Hablamos con un especialista y nos tiró los tips para hacer un lomito perfecto:
Ingredientes:
- Pan de lomo
- Lomo
- Lechuga repollada
- 1 Huevo
- 1 Tomate
- 50 g de jamón cocido feteado
- 50 g de queso tybo feteado
- Mayo casera
- Para comenzar, cortamos el pan de lomo a la mitad y lo tostamos por dentro en una plancha. Solo un ratito, hasta dorarlo, y lo retiramos.
- En el mismo lugar donde tostamos el pan, tiramos grasita o aceite para luego tirar el bife de lomo. En lo posible, previamente ternizado en la prensa. Y salado de ambos lados.
- En la plancha al lado del bife, hacer el huevo y darle la forma del pan. Tiene que estar alargadito para que el sándwich quede más prolijo y exista un equilibrio de sus ingredientes al probar el primer bocado… ¡mmm!
- Al dar vuelta el bife, le agregamos arriba dos fetas de queso tybo, una de jamón, y el huevito ya cocido.
- Volvemos al pan, le agregamos mayo casera a las dos tapas. La mayo puede ser con chimi o sin chimi, con provenzal, limón, ajo, ¡lo que te guste! Luego de colocar la mayo, elegimos una tapa y le agregamos la lechuguita repollada cortada con rodajas finas de tomate.
- Agarramos la espátula, juntamos el lomo con todos sus ingredientes y lo depositamos en el pan recién preparado. Agregamos la otra tapa del pan ¡y listo!
Siempre es mejor acompañarlo de unas buenas papas fritas en bastón bien crocantes. Y de bebida: un fernecito, para disfrutar de una comida única y ricaza.
Argentina, nacida en Córdoba. Investigadora en el área de lingüística. En formación constante sobre las Letras y sobre la vida, gracias a la Universidad Nacional de Córdoba. Mis experiencias en viajes me llevaron a aprender cada vez más idiomas y querer conocer diversas culturas desde adentro. Pienso en la escritura como una herramienta para transformar el mundo y volverlo un espacio justo y equilibrado.