¡Escribí! Notas de Lector
Ir a la secciónBuenos Aires - - Jueves 01 De Junio
Cuando la muerte llega pronto, la juventud se hace eterna y el mito, todavía más. En sus 27 años de vida, Rodrigo Bueno propulsó el cuarteto hacia todo el país a fuerza de carisma y energía: logró que hasta los porteños gritaran “soy cordobés” y bailaran incontenibles al ritmo de sus canciones.
Lo que no había conseguido la Mona Giménez lo hizo el Potro con una explosión repentina pero duradera. Llevó algo de la esencia cordobesa a cada rincón del país, invadió de alegría, color y música hasta a los más reacios y, en la cumbre de su éxito, se fue tan de pronto como había llegado.
Rodrigo lo hizo todo rápidamente, intensamente, y dejó inmortalizadas su sonrisa y su mirada pícara como testimonio perpetuo de su magia. Hizo que el cuarteto fuera no solo cordobés, sino también argentino. Después de todo, de alguna manera, en algo nos parecemos, ¿no?
Soy cordobés, me gusta el vino y la joda
y lo tomo sin soda
porque así pega más, pega más, pega más.
Soy cordobés, y me gustan los bailes
y me siento en el aire
si tengo que cantar.
De la ciudad de las mujeres más lindas,
del fernet, de la birra, madrugadas sin par.
Soy cordobés, y ando sin documentos
porque llevo el acento de Córdoba capital.
El cambio de milenio fue simbólico para muchos, siempre suelen sentirse esas fechas como “portales”, la energía se vuelve intensa, se acelera, al menos desde un lugar sutil o incluso supersticioso. Pero para el cantante no fue un año más. A fines del 1999 había sacado “A 2000”, un exitoso disco que lo llevó a vivir una temporada de verano impresionante, cargada de presentaciones, imparable. Dio 49 shows en 9 días, en distintos puntos de la Costa Atlántica y otras ciudades turísticas de la Argentina.
En abril del mismo año, el mito comenzaba a hacerse realidad: el estadio Luna Park lo vio brillar, subido a un ring de box que había elegido como escenografía. Fueron nada más y nada menos que trece presentaciones seguidas, “al hilo”, como suele decirse. Cada una repleta de espectadores que bailaron cada tema y aplaudieron cada palabra de Rodrigo. Porque si algo tenía El potro, eso era carisma.
Cuando cumplió los 27 años, en el mes de mayo, declaró que ya pensaba en su retiro. No era de extrañar que a pesar de su juventud, una parte de él ya quisiera tomar un descanso. Porque a los shows en vivo se le sumaban las actividades de prensa, programas de TV a los que acudía para ser entrevistado, las sesiones de fotografías que lo ubicaban en la tapa de las revistas más populares del espectáculo.
Ese mismo año, a comienzos de junio, casi como broche de oro para lo que antecedió la vorágine en apenas 6 meses, el cantante viajó a Cuba a cumplir un sueño: encontrarse con el astro del fútbol nacional, Diego Maradona y presentarle la canción en su honor, La mano de Dios.
Al regresar de su viaje, Rodrigo retomó sus compromisos, pero unas semanas después llegó el fatídico día que iba a ponerle fin a su vida y que encendería con más pasión que nunca la figura del mito.
Tanto su hermano Ulises, como su hijo Ramiro hoy se dedican a la música. Cada uno con su estilo, pero es innegable que el acercamiento a la profesión tiene que ver con Rodrigo. Y está muy bien que así sea. Debe resultar una mochila pesada por momentos, la bendita comparación que siempre está latente. Si lo saben llevar, solo queda agradecerle a El potro por abrirles las puertas.
Fecha de Publicación: 18/04/2018
Te sugerimos continuar leyendo las siguientes notas:
La universidad del cuarteto
La Mona Jiménez celebra
¡Escribí! Notas de Lector
Ir a la secciónNo hay comentarios
Comentarios
El recuerdo de las aguafuertes de Roberto Arlt, vecino dilecto de Flores, comparte esos aires fresco...
Desde junio la aerolínea low cost JetSmart ofrecerá doce vuelos semanales entre ambos destinos. Los...
De las mejores lectoras de estas pampas, la infatigable Victoria abarcaba la literatura universal pe...
El proyecto que transformará de manera integral la comuna se financiará con fondos del Consejo Feder...
Suscribite a nuestro newsletter y recibí las últimas novedades