La Mona Jiménez es el personaje que más alegría y anécdotas nos da. Es el ícono cordobés por excelencia, nuestro representante y nuestro mentor. Sin embargo, esto no lo deja exento de tomar decisiones polémicas, que lo ponen en tela de juicio. Muchas veces se propasó con sus seguidoras, tomando posturas machistas. En esta ocasión, es el despido de sus empleados lo que lo hace estar en falta.
En plena cuarentena y crisis mundial, el famoso cantante decide despedir a su banda. Que –vale la pena aclarar– es la que lo acompañó durante más de veinte años en los shows. En todos los escenarios a los que se subió y, sobre todo, en cada viernes de Sargento Cabral. Además, se trata de un equipo de 45 personas. Entre músicos, plomos, sonidistas, fotógrafos y técnicos. Personas, con sus respectivas familias, que trabajaban en blanco y hoy, en plena crisis, se encuentran desempleados. Algunos de ellos llevan más de 53 años trabajando con la Mona. Otros son más nuevos. Según algunas voces de la banda, los despidos fueron “de común acuerdo”.
Obviamente, como corresponde, cobrarán la indemnización de los años de antigüedad. Esto no cambia la situación de estas familias en la actualidad, que se encuentran sin trabajo en plena crisis.
Así dicen algunas de las estrofas del cuartetazo “Telegrama de despido” de Carlos “La Mona” Jiménez:
Un telegrama de despido
Que me decía que no fuera a trabajar
Que me dejaba sin presente ni futuro
A mi familia sin orgullo y dignidad
Un telegrama de despido
y como un niño me puse a llorar...
Como si fuera un desperdicio, un trapo viejo
así me echaban a la calle sin dudar
A quién le importa mi sufrimiento
si en la estadística solo soy uno más
Cómo le explico a mi familia
quizás mañana pueda faltar el pan
Son veinte años, casi una vida
que a esa fábrica le regalé
pero parece que nada cuenta
así dice este papel
¡Qué ironía!
En la composición de esta letra, la Mona demuestra conciencia social. Demuestra, como en otras ocasiones, saber lo que significa quedarse sin trabajo y ser jefe de familia. Sin embargo, en este caso, no pareció importarle. Y obró despidiendo a sus empleados igual.
Este hecho ocasionó polémica. Los medios dieron a conocer la situación y hasta salió el abogado de Carlos Jiménez a hablar. Más allá de lo que pase, la comunidad cuartetera expresó su repudio al accionar del cantante a través de redes sociales. Pero también recibió mensajes de apoyo de sus seguidores en plena polémica. Se habla de una crisis cuartetera porque, frente a esta situación, aumentaron los rumores de retiro del cantante. Y, además, el público cuartetero se dividió entre los que lo defienden y los que no lo bancan. Estos despidos indican la desintegración de la banda más seguida por los cordobeses. No sabemos qué pasará con los bailes de la Mona. Lo que sí sabemos es que sus empleados se quedaron sin trabajo.
Argentina, nacida en Córdoba. Investigadora en el área de lingüística. En formación constante sobre las Letras y sobre la vida, gracias a la Universidad Nacional de Córdoba. Mis experiencias en viajes me llevaron a aprender cada vez más idiomas y querer conocer diversas culturas desde adentro. Pienso en la escritura como una herramienta para transformar el mundo y volverlo un espacio justo y equilibrado.