En las películas los superhéroes usan disfraz, tienen superpoderes y combaten contra algún villano. Nuestro Vigilante del Fin del Mundo no necesita la máscara. Sus armas secretas son la ciencia, la perseverancia y globos, muchos globos. Su archienemigo es el más peligroso de todos, el temible cambio climático. Por eso, VAG Ushuaia, nuestra Estación de Vigilancia Atmosférica Global, no lucha solo por nosotros, sino por todo el planeta.
Un aporte de Tierra del Fuego al mundo
La Estación de Vigilancia Atmosférica Global Ushuaia, más conocida por sus siglas VAG, está ubicada en las costas del Canal Beagle. Ha cumplido 25 años al servicio de nuestro planeta, estudiando tanto los gases de la atmósfera como los de efecto invernadero, ozono y aerosoles. Todas piezas claves en la investigación del cambio climático, el agujero de ozono y la radiación solar vinculada con los rayos UV. Si bien nuestro Vigilante trabaja en un paraje desolado, no está solo, ya que forma parte de una red de 30 estaciones internacionales. Así, la información recolectada es sumamente valiosa. Nos permite conocer la situación de nuestra atmósfera y se utiliza para emitir recomendaciones para el cuidado responsable del medio ambiente.
Soltando globos
En la Estación VAG Ushuaia, el ozono se mide en forma permanente todos los días del año con tres equipos diferentes: un espectrofotómetro, un dobson y por medio de los ozonosondeos. Esta última medición es la más precisa y la más bella también. Se realiza utilizando un globo con gas helio que se eleva en la atmósfera hasta una altura de 50 kilómetros. Los ozonosondeos con globos se realizan desde agosto hasta diciembre una vez por semana y, en los meses donde se abre el agujero, se aumenta la frecuencia hasta tres veces por semana. Es un espectáculo inigualable que los científicos de la Estación se ocupan gentilmente en compartir a través de sus redes sociales.
¿Llevo paraguas?
La información recolectada por la Estación VAG Ushuaia tiene además efectos directos en nuestra vida cotidiana. Todos los datos obtenidos son utilizados para investigaciones, proyectos y boletines que emite la Organización Meteorológica Mundial y el Servicio Meteorológico Nacional. Entonces, cada vez que le ganes de mano a una tormenta o lleves la ropa adecuada para la temperatura del ambiente, ya sabés a quién agradecerle. Su nombre es VAG Ushuaia.
Madrynense y argentina. Lic. en RRPP (UP), especializada en Comunicación e Identidad Corporativa (UNIR) y docente universitaria. Apasionada por la comunicación en todas sus expresiones, porque como dice Paul Watzlawick “Todo Comunica”… las palabras, las reacciones y nuestro cuerpo. Mi desafío profesional es cuidar de “ese todo”, aportando mis conocimientos y gestionando las herramientas necesarias para que las comunicaciones fluyan como las olas del mar.